domingo, 24 de octubre de 2010

UNA RESPUESTA POCO CONVENCIONAL

Ernest Rutherford , premio novel de Química en 1908 , contaba la siguiente anécdota:
Recibí la llamada de un colega que iba a suspender a un estudiante por la respuesta dada a un problema de física. Fui elegido como árbitro.
El problema decía: “ Demuestre cómo es posible determinar la altura de un edificio con la ayuda de un barómetro”. El estudiante había respondido: “Lleva el barómetro a la azotea del edificio y átale una cuerda larga. Descuélgalo hasta la base del edificio , marca y mide. La longitud de la cuerda es la altura del edificio.”
La respuesta era correcta, pero no confirmaba que tuviera un buen nivel en física.
Le concedí seis minutos para responder la misma pregunta pero demostrando sus conocimientos de física.
Pasaron cinco minutos y no había escrito nada. Le pregunté si deseaba marcharse, pero respondió que tenía muchas respuestas. Su dificultad era elegir la mejor. En el último minuto escribió:
“Coge el barómetro, lánzalo al suelo desde la azotea del edificio, calcula el tiempo de caída con un cronómetro. Aplica la fórmula altura = ½ a.t2 . Y obtendrás la altura del edificio”.
Recibió la nota más alta.
Al reencontrarme con él, le pedí que me contara sus otras respuestas.
__Hay muchas – respondió -. Por ejemplo, coges el barómetro un día soleado, mides la altura del barómetro y la longitud de su sombra. Mides luego la sombra del edificio y aplicas una simple proporción: obtendrás la altura del edificio.
__Perfecto –le dije -, ¿Y de otra manera?
__Sí -contestó-, es un procedimiento muy básico. Coges el barómetro y te sitúas en la planta baja del edificio. Según subes las escaleras, vas marcando la altura del barómetro en la pared. Cuentas el número de marcas hasta la azotea, multiplicas la altura del barómetro por el número de marcas y ya tienes la altura. Pero si quiere un método más sofisticado, puede atar el barómetro a una cuerda y moverlo como un péndulo, con él determina el valor de g a nivel del suelo y en la parte superior del edificio. De la diferencia entre los dos valores de g se puede calcular la altura del edificio.
Existen otras muchas maneras – concluyo - .Probablemente, la mejor sea coger el barómetro, golpear con él la puerta del conserje y decirle. “Señor conserje, aquí tengo un bonito barómetro. Si usted me dice la altura de este edificio, se lo regalo”.
Entonces le pregunté si no conocía la respuesta convencional al problema ( la diferencia de presión marcada por un barómetro en dos lugares diferentes nos proporciona la diferencia de altura en ambos lugares).Evidentemente, dijo la conocía, pero durante sus estudios, sus profesores habían intentado enseñarle a pensar.
El estudiante se llamaba Niels Bohr ,físico danés ,Nobel de Física(1922) , un innovador de la teoría cuántica.